Mike Pence sobre crisis en Venezuela: “Debemos unirnos para aislar este régimen económica y diplomáticamente.”

La Casa Blanca
Oficina del Vicepresidente

25 de septiembre de 2018

Comentarios del Vicepresidente Pence
en el Evento sobre la Migración Regional y la Crisis Humanitaria de Venezuela

Sede de las Naciones Unidas
Nueva York, Nueva York

EL VICEPRESIDENTE: Presidente Duque, gracias por convocar esta reunión ministerial, por sus palabras de hoy y por trabajar incansablemente en Colombia, y ahora en el escenario mundial, para formar una respuesta integral a la crisis migratoria venezolana. Y no solo por las consecuencias de la crisis de Venezuela, sino también para involucrar a los distinguidos líderes que están aquí, las naciones representadas aquí, para volver a centrar la atención en la crisis política, económica y humanitaria que continúa desenvolviéndose para el gran sufrimiento del pueblo de Venezuela

Quiero agradecer al presidente Varela de Panamá. Quiero agradecer a nuestro vicesecretario de Estado Sullivan, quien nos acompaña hoy. Nuestros coanfitriones, los ministros de Canadá y Perú. Y a todos ustedes, distinguidos representantes de naciones, no solo de este Nuevo Mundo, sino de todo el mundo, por hacer tiempo para este importante foro.

Traigo saludos para cada uno de ustedes y gratitud por su presencia hoy de parte de un gran defensor de la libertad no solo en este hemisferio, sino en todo el mundo, a quienes escucharon esta mañana. Traigo saludos del presidente Donald Trump.

Esta mañana, cuando el presidente Trump se dirigió a la Asamblea General de las Naciones Unidas, el mundo vio de primera mano la resolución y determinación de Estados Unidos de América y todas las naciones libres del Hemisferio Occidental de apoyar al pueblo venezolano y hacer frente a sus opresores.

Como dijo hoy el presidente, lo que está sucediendo en Venezuela es una “tragedia humana”. Nicolas Maduro, al desmantelar su democracia, al imponerle a su pueblo las políticas fallidas del socialismo, ha llevado a la bancarrota a esa nación rica en petróleo, como dijo el presidente, la que una vez fue una de las naciones más ricas de nuestro hemisferio y, como agregó el presidente, llevó a su pueblo a la miseria, con millones de venezolanos obligados a huir con la angustia infligida por las políticas del régimen de Maduro y sus patrocinadores cubanos.

Hace solo unos momentos, el presidente Trump y yo nos reunimos con el presidente Duque, y discutimos en detalle no solo la situación pasada y presente de Venezuela, sino el reconocimiento de que se encuentra ante nosotros el trabajo más difícil para enfrentar esta crisis. Y eso es lo que nos trae aquí hoy.

Estados Unidos, a lo largo de nuestra historia, ha defendido la libertad. Y Estados Unidos apoya a Colombia y a todas las naciones amantes de la libertad del mundo.

Estamos hoy aquí porque, en este Nuevo Mundo, la que una vez fue una de las democracias más vibrantes de nuestro hemisferio, y próspera, bajo el régimen de Maduro tiene una de las peores tasas de asesinatos en el mundo, y casi 9 de 10 venezolanos viven en la pobreza.

Cada día que Nicolás Maduro se aferra al poder, unos 5,000 venezolanos abandonan sus hogares para escapar de la tiranía de ese régimen. Salen en masa a las naciones vecinas, que incluyen a muchas de las que están tan bien representadas hoy aquí.

Desde 2017, más de 2.6 millones de venezolanos han huido de su patria en un éxodo masivo, escapando de la violencia y la tiranía, y las privaciones. Es el mayor éxodo transfronterizo de la historia de nuestro hemisferio. Y como acaba de decir el presidente Duque hace solo unos momentos, es posiblemente la peor crisis que haya enfrentado nunca Latinoamérica.

Hoy, 1 millón de migrantes venezolanos están en Colombia; 400,000 están en Perú; 160,000 están en Ecuador; casi 85,000 están en Chile; y 75,000 en Brasil.

Al igual que muchos de ustedes en esta sala, he visto de primera mano los resultados y el impacto en las personas que sufren bajo la privación y la violencia de Venezuela que han huido de ese país. He visitado cada una de las naciones que acabo de mencionar. Me he reunido con refugiados del colapso de la democracia y la tiranía y la privación de Venezuela, y es desgarrador.

Nunca olvidaré mis encuentros con migrantes cuando mi esposa y yo visitamos Colombia. Mientras visitábamos un pequeño refugio, me encontré con una abuela que me dijo que finalmente había decidido llevarse a sus cuatro nietos y recorrer todo Venezuela para irse a Colombia porque las cosas habían empeorado tanto que los niños tenían que esperar en una fila a las cinco de la mañana con el fin de obtener un boleto para poder comprar un pedazo de pan a las cinco de la tarde. Fue desgarrador.

Cuando estuvimos en Manaos, estuvimos en un refugio de la iglesia, y nunca olvidaré a un padre rodeado de su esposa y sus dos hijos pequeños, que me dijeron con lágrimas en los ojos: “Es terrible volver a casa al final de un largo día y decirles a los hijos que hoy no vamos a comer”. Esa es la realidad en Venezuela.

Hablamos de colapso político. Hablamos de violencia y tiranía. Pero también tenemos que entender el costo humano de estas políticas fallidas. Y tenemos que enfrentar ese desafío con resolución y con unidad, con determinación y con generosidad. Y eso lo estamos cumpliendo.

Las naciones aquí representadas, las naciones de la región, han estado enfrentando este desafío con extraordinaria generosidad y compasión. Quiero agradecer al presidente Duque y a todas las naciones vecinas: naciones de toda la región que se han ofrecido para ayudar a los millones que huyen del régimen de Maduro.

Estados Unidos se enorgullece de apoyarlos. La generosidad de Estados Unidos hasta la fecha ha dado como resultado más de $45 millones en recursos públicos. Pero en este momento, también sé que la generosidad del pueblo estadounidense ha fluido hacia organizaciones de ayuda y ministerios y grupos no gubernamentales que se han unido a las familias que están teniendo dificultades en estos momentos. Y puedo asegurarles que la generosidad del pueblo estadounidense continuará.

En nombre del presidente Trump, me complace anunciar hoy que Estados Unidos de América proporcionará $48 millones de dólares adicionales en asistencia humanitaria a todos nuestros colaboradores del régimen … de la región, para enfrentar la crisis humanitaria que se está desencadenando ante nosotros.

Mientras sus naciones enfrentan los desafíos de esta crisis migratoria, Estados Unidos de América los apoyará.

Pero todos sabemos que brindar ayuda a aquellos que sufren bajo la tiranía en Venezuela no es la respuesta real. Esta crisis seguirá creciendo mientras el régimen de Maduro permanezca en el poder y continúe negando la democracia al pueblo venezolano, y continúe imponiendo la agenda socialista que ha empobrecido a esa nación.

Es por eso que debemos cortar la corrupción en el centro de esta crisis, y debemos hacer todo lo que podamos para seguir aislando al régimen de Maduro. Con ese fin, como anunció hoy el presidente Trump, Estados Unidos está imponiendo nuevas y duras sanciones al círculo interno de Maduro y asesores cercanos, aquellos que están explotando al pueblo venezolano y apoyando a narcotraficantes y criminales que amenazan la estabilidad no solo de la región, sino de todo nuestro hemisferio.

Debemos unirnos en este esfuerzo, de formas nuevas y renovadas, para aislar este régimen económica y diplomáticamente. Pero tengan la seguridad de que Estados Unidos de América seguirá respaldando a nuestros aliados en nombre de su seguridad.

Los informes de noticias de hoy son que el régimen de Maduro ha trasladado tropas militares a la frontera de Colombia como lo ha hecho en el pasado, en un evidente esfuerzo de intimidación. Y permítanme ser claro: Estados Unidos de América siempre apoyará a nuestros aliados por su seguridad. Y el régimen de Maduro haría bien en no poner a prueba la determinación del presidente de Estados Unidos o del pueblo estadounidense a este respecto.

Nos solidarizamos con Colombia y con nuestros aliados en este Nuevo Mundo debido a nuestros valores compartidos y nuestros intereses compartidos. Nos solidarizamos con nuestros aliados por la seguridad de nuestro propio pueblo, porque la prosperidad de la libertad y el avance de la seguridad en este hemisferio sirven tanto a los intereses de nuestro pueblo como a los suyos.

Pero, en última instancia, hacemos esto porque es, desde su mismo nacimiento, un hemisferio de libertad. Y el avance de la libertad en este hemisferio ha sido una historia que ha maravillado al mundo. Y creo que es imperativo, a medida que vemos esta crisis en desarrollo en Venezuela, que la abordemos por el costo humanitario; que la abordemos por la necesidad de acabar con la tiranía y el abuso de su pueblo. Que la abordemos por su amenaza a la seguridad en toda la región. Pero que la abordemos como naciones que creen en la libertad.

Y como volvió a dejar claro hoy el presidente Trump, seguiremos resueltos a apoyar a las personas amantes de la libertad, no solo en nuestro hemisferio, sino a los venezolanos que anhelan que se restaure la libertad y se restablezca la democracia en su tierra.

Y creemos que el pueblo de Venezuela recuperará su libertad si nos mantenemos unidos, si nos mantenemos unidos no solo en la generosidad de la ayuda humanitaria, sino si nos mantenemos unidos en nuestra determinación de aislar económica, política y diplomáticamente a este régimen hasta que se restaure la libertad.

Y tomamos todas estas medidas con el optimismo habitual del pueblo estadounidense, ya que creemos en la libertad. Creemos que, como declaró Simón Bolívar: “Un pueblo que ama la libertad será finalmente libre”. Y los pueblos del Nuevo Mundo aman la libertad.

Y trabajaremos con ustedes. Los apoyaremos. Apoyaremos al pueblo sufriente de Venezuela hasta que se restaure la libertad.

Les agradezco por todo lo que han hecho las naciones aquí representadas, hasta ahora, para enfrentar esta crisis y colaborar con nosotros.

Confío en que nuestro anuncio de hoy de un renovado apoyo estadounidense… las palabras del presidente hoy ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, demuestren la importancia de este tema no solo para este gobierno, sino también para el pueblo estadounidense.

Y prometemos que estamos preparados para seguir apoyándoles para ayudar a las víctimas del régimen de Maduro, para apoyar la noble meta del pueblo venezolano de rescatar a su país, reconstruir su democracia y reclamar su derecho de nacimiento de la libertad.

Y sé que con su firme apoyo, con la generosidad de las naciones aquí representadas, con la solidaridad de las naciones amantes de la libertad, no solo en todo el Nuevo Mundo, sino en todo el mundo, veremos restaurada la libertad en Venezuela en beneficio de su pueblo, nuestro hemisferio y el mundo.

Por lo que muchas gracias, y que Dios los bendiga. (Aplausos.)

FIN

Esta traducción se proporciona como una cortesía y únicamente debe considerarse fidedigna la fuente original en inglés.