Los trabajadores de Uruguay y de Estados Unidos que hayan dividido sus carreras entre estos dos países podrán, a partir del 1 de noviembre de 2018, computar en su historia laboral los años trabajados legalmente en ambos. Del mismo modo, quedará facilitado el flujo de trabajadores entre Estados Unidos y Uruguay y la operativa de empresas e instituciones internacionales, al quedar eliminada la doble aportación a la seguridad social.
Para celebrar este nuevo ejemplo de cooperación y conquista de beneficios para los ciudadanos de Uruguay y de Estados Unidos, la Embajadora de Estados Unidos en Uruguay, Kelly Keiderling recibió al Vicecanciller, Ariel Bergamino, al Ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro y al Presidente del Banco de Previsión Social (BPS), Heber Galli en la sede diplomática de los Estados Unidos.

En el lobby de la embajada norteamericana, Keiderling, Bergamino, Murro y Galli hicieron uso de la palabra, ante jerarcas de Presidencia de la República, Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, Banco de Previsión Social (BPS) y funcionarios de la Embajada de Estados Unidos.
“Nos enfrentamos a un mundo laboral que cambia a un ritmo vertiginoso”, comenzó diciendo Keiderling. “Los lugares de trabajo modernos evolucionan, cambian los escenarios, las necesidades y las normativas”, describió. “Los gobernantes nos preguntamos qué podemos hacer para ayudar a nuestros ciudadanos, cómo empoderarlos, cómo brindarles más y mejores oportunidades, cómo anticiparnos a las necesidades que tendrá un mercado laboral que aún no conocemos.”
La embajadora aseguró que un convenio como este da respuestas a estas interrogantes e inquietudes. “Refleja las prioridades y la determinación de Estados Unidos y de Uruguay de ayudar a nuestros trabajadores y a nuestros empleadores, y de preparar a nuestras economías para enfrentar ese mundo vertiginoso.”

Por su parte, el Ministro de Trabajo de Uruguay, Ernesto Murro, resaltó el trabajo y la cooperación entre los equipos del Banco de Previsión Social de Uruguay y de la Administración de la Seguridad Social de los Estados Unidos. “Rápidamente fueron capaces de comprender y de trabajar y sólo con dos rondas de negociación, una en Montevideo y otra en Baltimore, lograron concretar el convenio en sí, la reglamentación administrativa y los formularios”, destacó.
Como resultado, dijo el Ministro, existe ahora un convenio que tiene dos objetivos fundamentales: “Acumular los años de trabajo en uno y en otro país para obtener una jubilación que se paga proporcionalmente y la posibilidad de que trabajadores especializados y técnicos viajen de un país a otro y puedan trabajar hasta 5 años en el otro país mientras continúan aportando a su seguridad social en su país de origen”.
Para finalizar, Murro subrayó la actitud del gobierno de Estados Unidos en darle continuidad a este proyecto binacional a pesar del cambio de administración que tuvo lugar a mitad del proceso. “Quiero destacar la actitud que han tenido los dos gobiernos estadounidenses, el de Obama y el de Trump y las dos embajadoras: la Embajadora Julissa Reynoso y la Embajadora actual, Kelly Keiderling. Sin duda han dado una continuidad a este proceso, que es muy importante”.
Al hacer uso de la palabra, el Vicecanciller, Ariel Bergamino dijo que el convenio “se da en el marco de una relación bilateral que tiene más de 150 años y que ha superado la prueba del tiempo”. “Aquí estamos. Y no estamos por estar. Estamos para hacer”, dijo Bergamino. “Al fin y al cabo, la tarea de los gobiernos es acompañar a la gente en la conducción de sus propias vidas”, finalizó.